¿Qué diferencia a su empresa respecto a otras similares?
Nos diferencia nuestra capacidad de dar al sector una propuesta integral de servicios analíticos y de consultoría, desde el asesoramiento en campo para que la producción de aceituna sea eficiente y sostenible, pasando por el acompañamiento en el proceso productivo del aceite y su comercialización. Estudios de la calidad y pureza del aceite, control de inocuidad de los productos que se ponen en mercado y velar por el adecuado cumplimiento de los requerimientos ambientales en la producción son parte de nuestra propuesta de valor.
Estos diferenciales están basados en el conocimiento profundo de AGQ Labs del sector, de sus necesidades y de sus inquietudes. La experiencia de nuestro equipo de profesionales, expertos en diversas disciplinas, combinado con instrumentación avanzada, acreditaciones y reconocimientos como el del Consejo Oleícola Internacional, son la clave para poder tener interpretaciones técnicas de los resultados analíticos para ayudar en la toma de decisiones.
¿Con qué tecnologías cuenta la empresa enfocadas a los profesionales del sector del olivar y del aceite de oliva?
Disponemos de varios servicios únicos y distintivos que han sido desarrollados con el uso de tecnologías de vanguardia. Nuestro laboratorio de suelos agrícolas, Soil Factory Lab, dispone de los equipos de laboratorio más avanzados con total automatización de los procesos analíticos. Esta tecnología punta, no solo nos permite mantener un altísimo ritmo productivo, sino que además nos garantiza la calidad y precisión de los datos obtenidos.
Por otro lado, con nuestros servicios de mapas GIS (Geographic Information System) y NDVI (Normalized Difference Vegetation Index), nuestros clientes disponen de mapas satélite de diagnóstico de distribución y evolución de los nutrientes en suelo y las plantas durante todo el ciclo del cultivo que pueden consultar en una avanzada plataforma online interactiva. Estos mapas de fertilidad son una herramienta de agricultura de precisión indispensable para conocer el estado nutricional de los cultivos y trabajar para lograr una agricultura más productiva y sostenible.
También disponemos de un sistema patentado a nivel mundial para el seguimiento nutricional de cultivos que incrementa la producción, mejora la calidad y ayuda a conseguir más rentabilidad. Todo esto se consigue optimizando costes y recursos de fertilización y riego, al mismo tiempo que se controla el nivel de salinidad, se evita la lixiviación de nitratos y otros elementos, respetando el medioambiente.
Por último, nuestro departamento de I+D+i trabaja de forma constante en el desarrollo de nuevas metodologías analíticas y en la automatización y robotización de los procesos de laboratorio.
¿Qué valor da el consumidor de aceite de oliva a la seguridad alimentaria? ¿Y los productores?
Para el consumidor, la seguridad alimentaria en el aceite una exigencia básica, consumir productos seguros. Pero también pone su atención en otros factores también fundamentales como la calidad y pureza del aceite, su valor nutricional, la producción responsable y sostenible con el medio ambiente, con el entorno social. Asimismo, preocupación del consumidor es el precio indudablemente, poder acceder al producto.
Esta misma preocupación se extiende a los productores, que velan por la seguridad de los consumidores, atendiendo a sus demandas en cuanto a disponibilidad, inocuidad y precio, aun cuando eso en ocasiones puede afectar a sus márgenes de beneficio. Es por ello por lo que la profesionalización en el sector es permanente para conseguir atender a los intereses de todos los actores de la cadena.
¿Cómo animaría a los profesionales de la cadena de valor del aceite de oliva a asistir al Congreso Mundial del Aceite de Oliva?
Este tipo de encuentros deben reunir a todo el sector, se trata de poner en común nuestras inquietudes, nuestras ideas, nuestras necesidades, etc., y profesionalizar un sector que merece brillar y destacar por encima de todo. Hay que formarse e informarse del funcionamiento del sector en otros países, con los que formalizar alianzas estratégicas y de los que siempre se puede aprender. Estos eventos nos sirven para darnos cuenta de que todos aportamos, de modo que participar es fundamental para avanzar juntos y en la misma dirección.